Los sitios de destino desaparecen y en su lugar quedan los puentes: las noticias ya no hablan del mundo sino de la versión de quien las paga (acuerdos de publicidad política); la blogósfera y el ciberespacio de las redes sociales está siendo colonizadas por catastróficas campañas cuyos orquestadores han perdido el hilo que conecta las causas sociales con las propuestas políticas (si es que acaso existieran).
La concentración de la propiedad de medios de comunicación lleva a la expansión de canales, pero también a la reducción de la agenda, pues la multiplicidad de conductos comunicativos se simplifica por el control de la información, ocasionando el efecto contradictorio de reducirla mientras los medios aumentan: la misma información, con el mismo enfoque circula por todos los medios pertenecientes a un corporativo, reduciendo las posibilidades de encontrar alternativas reales distintas.
Y ese control es poder real. Los magnates de la comunicación lo saben. El episodio de la Ley Televisa de hace tres años y ahora el (des)encuentro entre Felipe Calderón y Carlos Slim no son otra cosa sino evidencias del poder que acompaña al control de los símbolos y su maquinaria de producción. Y la incapacidad de los gobernantes de hacer valer los intereses democráticos mediante límites necesarios a los intereses privados.
Las hibridaciones se mueven, entonces, hacia muchas direcciones. Por ejemplo, el "periodismo ciudadano". Siendo el periodismo una práctica profesional con rutinas especializadas de búsqueda y tratamiento de la información ¿puede llamarse periodismo si lo hacen los "no periodistas"? Hay ahí un debate entre los puristas de los conceptos. Para mí, el asunto se resuelve en la hibridación obligada por los propios grupos sociales que no se detienen ante conceptos teóricos, sino que empujan, arriesgan, luchan por encontrar una solución a las problemáticas que enfrentan.

Estos tiempos nos obligan a no ser deterministas, definitivamente. Y con ello, debemos abrir las ciencias sociales para plantear problemáticas bien fundamentadas. Para mí, eso es lo complejo, pues si no, ¿cómo podría ser válida una investigación tan "híbrida"?
ResponderEliminar¡qué retos!
Así es Corina... son grandes retos.
ResponderEliminarY ¿con qué fin toda esta dialéctica en historia?
ResponderEliminar¿para qué ir al paraíso estando muerto? Si la gloria está muy lejos de este huerto. Todos juntos, afirman los que saben de distancias llegaremos al final de la estructura escultura de cadáver y concreto a posarnos al final de la cultura. Hay también quien afirma que tan sólo es sufrimiento soportable nadamas en el olvido
que el que canta va buscando algún sediento para hecharle encima su vaso vacío... E.V.A.
Gracias por recordar esa canción, E.V.A.
ResponderEliminarEl poder al que nos enfrentamos, se alimenta del dinero, como lo pones en tu post, los dueños de la comunicación, insitan a la desinformación, y a la par que gente se organiza, y que levanta el puño, de algunamanera, los tratan de borar de su coartada... Radio Comunitaria Tierra y Libertad, en la conglomeración de urbanidad, en Monterrey Nuevo León, es una muestra de que los otros medios, el no lo hacen periodistas, el que verdaderamente informaba, y no vendia notas, el que de alguna manera, sucumbia a los medios en aquella ciudad, hizo temblar a los corporativos, con una sóla palabra, el gobierno, y todos sus miembros (corporativos, funcionarios, capitalistas, dinero) lograron con lujo de violencia, entrar a confiscar, iniciar juicios meramente politicos en contra de los compas... esa palabra es "ilegal" buen post, y a huevo que buena rolita, saludos
ResponderEliminarGastón, gracias por tu comentario. Durante todo el siglo XX los medios estuvieron subordinados al gobierno, y ahora ambos, medios y gobierno están subordinados al dinero. Por eso tenemos que hacer valer nuestras voces en espacios verdaderamente independientes y verdaderamente ciudadanos. Y sí, las rolas del Rockdrigo, aunque él ya no esté, siguen haciendo sonar su voz transgresora de aquellos que buscan el control...
ResponderEliminar