jueves, 12 de noviembre de 2009

Está vivo... Todavía muerde...




El Periodismo está lleno de vitalidad y en permanente reinvención. Si lo consideramos como una práctica social, y no solamente como un producto mediático, la mirada se enriquece y las posibilidades se amplían. El periodismo constituye, para mí, un objeto de interés por muchas razones:
  1. Sigo creyendo que es portador de una promesa sustancial para la instauración de la democracia real, deliberativa, al permitir (por lo menos potencialmente) la diversificación de las fuentes de información de las cuales podemos abrevar y alimentar nuestra participación política.
  2. Se desborda a sí mismo, trasciende a los medios y a los periodistas y estimula respuestas y contra-respuestas; acciones, reacciones y contracciones.
  3. Se mantiene como punto de referencia ineludible para la construcción de lo público (agenda-setting, agenda-building).
  4. Confabula contra el poder, se alía con el poder, ejerce el poder, lo vigila, lo critica, lo negocia, mueve la cola, lame las manos y las muerde, todo esto simultáneamente... es contradictorio.
  5. Puede ser tomado por asalto por los ciudadanos, por los poderosos y, a veces, por los propios periodistas.
  6. Practicarlo es un riesgo, particularmente en México según la organización Reporteros Sin Fronteras, pero también es un privilegio.

El periodismo, insisto, como práctica social se mueve, no permanece estático. Y se incorporan nuevas dimensiones en las que encuentra redefiniciones y transformaciones:

Del periodismo local al translocal. Los acontecimientos locales reportados como noticias ya no pueden ser pensados como aislados y provincianos, sino incorporados a redes de relaciones que conectan lo local con lo global, estableciendo nuevas maneras de comprender lo local trascendiendo territorios físicos.

Periodismo ciudadano. Redes de ciudadanos comunes pugnan por espacios de participación para relatar el acontecer desde su mirada. La Internet ha abierto nuevas posibilidades para su práctica.

Periodismo multiplataforma o multimedia. La convergencia tecnológica que significa la posibilidad de operar diversos medios en lenguaje digital, ha reconfigurado las prácticas periodísticas profesionales para diversificar los canales por los cuales se transmite la información. Un riesgo inherente a esto resulta en el hecho de la concentración de la propiedad de medios diversos que transmiten la misma información, con lo que se amplían los canales pero no la oferta informativa. El debate al respecto es que esta situación puede debilitar la democracia en lugar de fortalecerla.

En fin... múltiples reflexiones y más ricas pueden ser emprendidas... Por eso, me interesa mucho seguirle el paso al periodismo y sus movimientos.